Pues eso amig@s que la sorpresa de ayer me hizo mucha ilusión aunque al principio me costara expresarlo pero es que me quedé alucinada. Ha sido un pedazo de detalle que no me esperaba y nos dió mucha alegría. Así que estoy muy orgullosa de la cuadrilla y quiero que sigamos riendonos, llorando, charlando, bailando, preguntando qué tal bien, haciendonos los culturillas, abandonandonos los dìas que no estamos para nadie y que luego una llamada te hace olvidar todo y en definitiva para que el equilibrio no se apodere de nuestras vidas. Ayer en la cena me lo pasé muy bien y luego esas tres horas de charla los cuatro que nos quedamos se me pasaron volando de lo agusto que estuve. Por eso y por lo que nos queda: MILA ESKER
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