Nada que decir

Aunque lo parezca, no tengo ninguna intención de homenajear a fito. Por fin me decido a escribir algo en el blog después de tanto tiempo y no tengo ni idea de lo que poner. En los momentos en los que la gente más nos necesita parece que nos quedamos en blanco y con cara de tontos y no tenemos ni idea de por donde salir. Por muchas veces que nos haya tocado vivir situaciones parecidas da la sensación de que nunca aprendemos de lo anterior. O tal vez el silencio es la mejor compañía. No lo sé. Lo que recuerdo es que cuando lo pasaba mal, siempre había alguien de la cuadrilla que me intentaba sacar una sonrisa, que se quedaba a mi lado o que me daba una palmada en la espalda. Aquello me era suficiente para sentirme acompañada y me hacía ver que no estaba sola en esos momentos tan jodidos. Sólo espero que todos podamos sentir lo mismo cuando estamos así. Un abrazo amiga